La Fundación Eurocaja Rural seguirá colaborando con el aceite de oliva virgen extra elaborado por la Fundación Consejo Regulador de la D.O.P. «Montes de Toledo», que aglutina a más de 10.000 olivareros y 32 almazaras y envasadoras de Toledo y Ciudad Real que producen anualmente una media de veinticinco millones de kilos de aceite de oliva, de los cuales seleccionan los de mayor calidad para su comercialización bajo el amparo de esta Denominación de Origen.
Así quedó de manifiesto tras la firma del convenio de colaboración que mantienen desde hace años y que ha sido renovado por el presidente de Eurocaja Rural, Javier López Martín, y el presidente del Patronato de la Fundación Consejo Regulador de la D.O.P. «Montes de Toledo», Andrés Gómez Mora. También asistieron al acto el director general de Eurocaja Rural, Víctor Manuel Martín López, y el director de Certificación de la Denominación de Origen Aceite Montes de Toledo, Enrique García Tenorio.
Tras la firma del acuerdo, los presidentes de ambas partes se felicitaron por asentar la cooperación en beneficio de un producto que tanto aporta a nuestro PIB, al desarrollo de nuestra economía y a nuestra salud.
Eurocaja Rural lleva colaborando con la D.O.P. desde su origen, certificando así la importancia que dedica al sector agroalimentario de todo su ámbito de actuación, así como a un producto muy valioso a la hora de fijar población y generador de una industria productora oleícola que en Castilla-La Mancha ocupa la segunda posición en nuestro país.
Detalles D.O.P. «Montes de Toledo»
La D.O.P. «Montes de Toledo» fue creada en 1998 para proteger y promocionar los aceites de oliva vírgenes producidos en esta zona, a la vez que garantizar al consumidor la máxima calidad y seguridad del producto que elabora.
El aceite de oliva de los Montes de Toledo es considerado como uno de los mejores del mundo. Se trata de aceites de oliva exclusivamente de la categoría Virgen Extra cuya obtención se realiza a bajas temperaturas por medios exclusivamente físicos, por lo que conservan intactos el sabor y aroma del fruto del que proceden.
Su equilibrada composición de ácidos grasos, junto a su contenido en vitaminas y antioxidantes naturales, hace imprescindible su uso en una alimentación saludable, siendo el principal ingrediente de la llamada dieta mediterránea, reconocida mundialmente como la más adecuada para el organismo.
