El 75% de los padres no cuenta con ningún tipo de control parental del móvil de sus hijos, pese a que al 31% le preocupa que su hijo pueda hacer un uso indebido de este dispositivo, según una encuesta realizada por S2 Grupo, empresa especializada en ciberseguridad.
En torno al 29% de los padres compran a sus hijos su primer ‘smartphone’ antes de los 12 años, lo que pone de manifiesto que los niños cuentan, cada vez desde edades más tempranas, con este tipo de dispositivos. Esto multiplica la importancia de «acompañarles» en su uso para aumentar su seguridad.
«Los padres no podemos olvidarnos de que también debemos ejercer nuestra función de cuidado en el entorno de las nuevas tecnologías para proteger adecuadamente a nuestros hijos y ayudarles a que lo utilicen de una forma adecuada», ha destacado Miguel A. Juan, socio-director de S2 Grupo.
El 18% de los padres reconoció que su hijo o algún conocido había sido víctima de bullying a través del móvil. El acoso entre menores, el envío de fotografías íntimas o el acceso a apps o juegos que vulneran la seguridad son algunos de los principales peligros a los que se enfrentan los jóvenes.
Por lo que se refiere al tiempo que dedican diariamente a su uso, el 51% de los padres aseguró que no necesitaban realizar ningún tipo de control porque sus hijos lo usaban «de forma responsable y adecuada», mientras que el 24% sí lo hacía porque entendía que los menores «descuidaban tareas importantes».
