Ayer, día 2 de septiembre, por ser el primer viernes de este mes, Quer vivió el día grande de las fiestas que la villa celebra en honor del Santísimo Cristo de la Misericordia. El pasado domingo, día 28 de agosto, la Hermandad del Cristo, que cuenta con 126 cofrades y es el colectivo más antiguo de la localidad setera, bajaba la talla del Altar Mayor para colocarla sobre sus andas y poderla así llevar en procesión vespertina de ayer viernes.
El hermano mayor entrante en el año 2016 es Luis Padrino, de 34 años. “Para mí es un honor asumir el cargo. Es algo que sólo pasa una vez en la vida y que me provoca gran emoción. Mi familia es de Quer. Con el paso de los años he visto cómo muchos de mis seres queridos han ido ocupado el mismo puesto que yo ahora, por lo que siento un enorme respeto por él, al tiempo que orgullo al poder asumirlo. El día que nací me hicieron miembro de la Hermandad, y esa es la intención que tengo cuando tenga un hijo”, declaraba ayer por la tarde tarde frente a la talla del Cristo.
El hermano saliente es Ricardo Duque, a quien siempre que habla del Cristo, le tiembla la voz de emoción. “El pasado ha sido para mí un año muy especial. He esperado mucho para ser hermano mayor, y ha coincidido que lo he sido en el Año de la Misericordia decretado por el papa Francisco. Además, he tenido el honor de representar a la Hermandad fuera de Quer por lo que este tiempo quedará para siempre en mi memoria. En la Hermandad, y en los actos que organiza, cada persona que está sabe por qué está y quiere estar”, termina.
Por la mañana tenía lugar la Misa Mayor en honor del Santísimo Cristo de la Misericordia. El presidente de la diputación, José Manuel Latre, quiso acompañar a los seteros en la celebración. La devoción hacia el Cristo de la Misericordia, representado en una maravillosa talla policromada del siglo XVII, se pierde en el tiempo. La imagen es una de las más bellas de cuantas procesionan en la provincia. Según cuenta la leyenda y el propio himno del Cristo que se canta en Quer, a la imagen morena que llevan en andas los seteros “la trajeron de las Américas”. Y dicen también que los hermanos enterraron la imagen del Cristo durante la Guerra Civil para evitar su destrucción.
La Asociación Musical Villahermosa de Alovera recogía al Hermano Mayor, Luis Padrino, en su casa, y al alcalde de Quer, José Miguel Benítez, en el Ayuntamiento, acompañándoles a ambos camino de la Iglesia Parroquial donde subastaron los brazos de su carroza y sus diez cintas. Después, la procesión con la imagen, tostada y preciosa que compone con el sol que cae sobre la campiña guadalajareña imágenes bellísimas.
De nuevo con la talla en la Plaza de Juan Pablo II, Francisco García dirigió la puja para entrarla de nuevo en la Iglesia de Nuestra Señora de La Blanca. Antes de terminar la ceremonia, los seteros, todos juntos, cantaron el himno del Cristo: “De tierras americanas vino a Quer, tesoro y gloria, en ti, Cristo agonizante, Cristo de Misericordia, me desgarra tu dolor de verte en la cruz sufriendo, que estando por muriendo, aun me miras con amor”.
Se puede reconocer a los hermanos de la Cofradía del Cristo por su distintivo, una cruz con lazo rojo, que antiguamente era obligatorio llevar para entrar en misa y para tener acceso al convite que ofrece el hermano mayor después de la Misa del día después del Cristo, en honor a los hermanos difuntos. Según manda la tradición, a esta misa posterior, que se celebra hoy, no puede faltar ninguno de los miembros de esta institución.
Para el alcalde de Quer, José Miguel Benítez, las fiestas “están resultado un éxito de participación y público que esperamos se mantenga hasta el domingo”. Sobre la parte más solemne y tradicional de las fiestas, Benítez opinó que “deben mantenerse y potenciarse, porque son las raíces de Quer”.